Una vez más la población peruana se ha auto-convocado para una movilización colectiva de protesta y reclamos que incluyen a los tres poderes del estado (ejecutivo, congreso y judicial) ante las evidencias de posturas dictatoriales y fácticas que colisionan con un real régimen democrático. Los sucesivos errores y transgresiones a la Constitución vigente, la incontenible corrupción estatal, el despilfarro del erario, y la impunidad por 70 crímenes de lesa humanidad, ponen en riesgo la estabilidad y gobernabilidad en el país.
A pesar de las cortapisas, terruqueo, estigmatización denigrante y racista, impedimentos de circulación en plazas y calles con fuerzas militares y policiales, publicidad mediática comprada con recursos estatales y otros obstáculos, la población peruana con su coraje, su creatividad y su audacia, supo expresar con voces y pancartas retumbantes su descontento e indignación por lo que ocurre en el país.
Es bueno y positivo que la población y en particular los jóvenes nunca pierdan su DERECHO A LA PROTESTA Y LOS RECLAMOS, pues es una forma de contener y corregir los ABUSOS DE PODER GUBERNAMENTAL. Toda democracia se sustenta en el poder y saber del pueblo, y el principal principio, valor y objetivo de toda democracia, es el BIEN COMÚN.
Espero, que esta grandiosa patria peruana, que tiene recursos naturales para ser un PAÍS DEL PRIMER MUNDO, también tenga recursos humanos, y muchas personas honestas, sabias y leales que ayuden a construir el nuevo camino del desarrollo con prosperidad, Que vengan 50 años de intensa revolución por el progreso horizontal donde la auto-formación y la seguridad alimentaria sean sus primeros pilares.