martes, 21 de marzo de 2017

CORREGIR LOS ERRORES HUMANOS: A Propósito de Desastres Naturales

Ciertamente la naturaleza de nuestro planeta, desde la creación, tiene sus leyes desde  millones de años, ellos seguirán hasta el fin de los tiempos. Sin embargo, el ser humano que la habita no se interesa por aquellas leyes, al contrario las vulnera sin entender que su acción, más tarde, le traerá desolación y muerte.

Por ejemplo, la contaminación global  originado por la gran industria y el consumismo de insumos artificiales, es decir manipulados, así como las negligencias humanas frente a la naturaleza y su poder, ahora nos dan una lección muy dura. Otra muestra, es el crecimiento de urbes sobre pobladas, con abundancia de edificios, y  estos lugares también son territorios donde día a día se multiplican los problemas y necesidades, a tal punto que difícilmente podrán ser atendidos o solucionados.

El reciente desastre natural ocurrido en mi país Perú, retrata con claridad la ruptura de las leyes naturales, debido a que en 200 años de vida republicana, nunca existió una planificación  urbana apropiada para el crecimiento territorial y social, y al no existir  pautas ni cultura habitacional, el poblador hace lo que mejor le parezca. Invade terrenos, se instala en quebradas, siembra en las riberas de los ríos, construye  viviendas sobre cerros y cumbres, en otras palabras  cava   y juega con el peligro. 

La marginación, la informalidad, la vulneración y la contaminación global, ahora se asocian, para causar  grandes tragedias con dolorosas pérdidas en todos los aspectos de la vida ciudadana.  Entonces, no es razonable seguir persistiendo en los errores humanos que tarde o temprano alterarán las leyes de la naturaleza, aquella que es fuente de vida y existencia.

En adelante, sólo nos queda subsanar los errores y las negligencias, y pasar a un estado de reflexión y toma de conciencia sobre lo ocurrido, y en tal sentido corresponderá a los técnicos y autoridades disponer soluciones de rehabilitación y reconstrucción bajo una orientación visionaria de la expansión urbana, principalmente en aquellas áreas críticas.

Finalmente, expreso mi solidaridad a todos los damnificados y también mi satisfacción por ver tantas expresiones de socorro y asistencia de instituciones locales, de gobiernos amigos, de jóvenes voluntarios, de las fuerzas militares gubernamentales, y el coraje de madres,  cuya participación ha hecho aflorar valores humanos de las población peruana. Todos estamos uniendo  corazones y esperanzas para superar el dolor y la tristeza, especialmente para aquellas miles de familias que lo han perdido todo. (RCHV).




viernes, 10 de marzo de 2017

ESTOY AVERGONZADO Y TRISTE: Me siento Traicionado

Como ciudadano elector, que ha vivido más de seis décadas, con un desempeño profesional independiente y mayormente dedicado al voluntariado cultural y artístico; además siendo testigo viviente del rol de siete gobiernos de turno en mi país Perú; me siento defraudado, apenado y furioso por la TRAICIÓN y el OSCURANTISMO con lo cual han manejado la hacienda pública.

Los humanos que hemos tenido una vida basada en valores sólidos desde la cuna materna, y en lo particular, el haber tenido un código de vida y desempeño personal, basado en una trilogía de valores: Simplicidad, Autenticidad y Resiliencia, nos sentimos irritados y muy avergonzados por la conducta impropia y el camino equivocado que han seguido los caudillos de la élite política, aquellos  que decidieron el destino de nuestra querida patria.

Según revelaciones recientes, no sólo han regalado las riquezas naturales a postores foráneos, además ha recibido SOBORNOS y COIMAS,  en las licitaciones de las obras más grandes de infraestructura civil, cuyas inversiones superan los 100 mil millones de dólares, en los últimos veinte años. 

Estos actos sucios y penales de  corrupción, no sólo han destruido la moral de la ciudadanía, sino que han frenado el desarrollo del país, tal como se observa en la realidad del presente. Los hospitales están abandonados, la miseria se multiplica, la violencia aumenta, faltan escuelas en la sierra y en la amazonía,  los caminos se destruyen por falta de mantenimiento, y lo peor la maldita corrupción se ha multiplicado en todas las instituciones gubernamentales y algunas privadas. Allí todo funciona con un soborno y con otras artimañas vedadas.

Ciertamente, no vasta estar triste, avergonzado y frustrado, tampoco de protestar en las calles o en los medios. Tenemos que reaccionar con inteligencia y pasar a ser EDUCADORES Y FORMADORES de un perfil humano mejorado con el imperio de valores civiles y humanos, y si ellos son fuertes, serán la coraza suficiente para repeler cualquier insinuación al delito o la maldad.

Los invito a ser PREGONEROS PERSISTENTES de lo justo, lo correcto, lo humano, lo sensato; del equilibrio, de la creatividad, del saber verdadero, y del bien común. Son ellos los que pueden finalmente ser la energía poderosa que cambie el rumbo equivocado de hombres y mujeres perversos e invadidos por el egoísmo y la codicia.

Aún estamos a tiempo de proyectar y seguir un camino de esperanza y para ello hay que corregir los errores del pasado, tomando conciencia de lo fatal y pernicioso de las cosas y los hechos ocurridos. (RCHV).